Al parecer diariamente se están sucediendo una serie de nuevos reglamentos que convertirán nuestra cotidianidad en un universo paralelo en el momento en que se nos antoje una hamburguesa, un helado, unos tacos, ir al cine y hasta el simple acto de salir a caminar, a tomar un poco de aire, respirar. Es el caso aquí en México, porque aún ignoro las medidas que serán tomadas en otros países aparte, claro está, de discriminarnos, lo cual no es totalmente nuevo, ahora además de ser “latino” en tierras primermundistas, seremos algo peor “mexicanos infectados de influenza”, me pregunto ¿qué sigue?.
Aunque me rehúso a ver las noticias, es inevitable no hacerlo en ocasiones, (especialmente ahora que la emergencia sanitaria nos ha tenido confinados en un búnker), oficialmente se dieron a conocer las nuevas reglas de convivencia entre la sociedad mexicana, entre ellas las que más llamaron mi atención fueron las que aplicarán en los cines y en los lugares de trabajo. Si se te ocurre acudir a ver una película, tendrás que dejar pasar dos asientos entre cada persona y pensé que la única ventaja de esta medida será que aprenderé a ir al cine sola y al mismo tiempo me pregunto, si tenemos que guardar una distancia de al menos 2 metros ¿qué pasa con los que se sientan enfrente de nosotros, ampliarán las salas de cine sólo para hacernos sentir más cómodos en este universo paralelo que están creando? Quizá estoy haciéndome preguntas absurdas, sin embargo, lo prefiero al hecho de aceptar sin chistar lo que proponen las nuevas reglas de comportamiento.
No cabe duda que de ahora en adelante tendremos que literalmente guardar distancia, pedir nuestro espacio personal ya no será más una exigencia petulante, no obstante, no todo me parece absurdo dentro de esta nueva realidad, ya que creo justo y necesario que se haga una limpieza general en el país, y así dejemos de ser el eterno cliché para los extranjeritos que nos visitan y nos acusan de haberles causado una interminable lista de enfermedades infecciosas, ¡Gracias Dios, dejaremos de ser un cliché en las películas de Hollywood! ¡Ya puedo continuar ahora sí mi destino literario!
Amigos, he sido sincera con todos ustedes, este encierro forzado, a pesar de mis escapadas, ha tenido diversos efectos secundarios, el positivo: se creó este espacio para compartir nuestros demonios; el negativo: creo que he subido un par de kilos. Les dejo a ustedes este recuento, no sé si del todo completo, pero si reflexivo.
Gracias nubes pasajeras.
Tere Cuello. Miss Neck.
miércoles, 6 de mayo de 2009
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Comparto contigo la renuencia a ver el noticiero y a verlo contra mi voluntad cuando se escuchan tremendas babosadas como este tipo de "medidas preventivas". También comparto contigo la ignorancia de medidas que se han tomado en otros países.
ResponderEliminarYo creo que la población en general es inmune a esta influenza, o virus A/H1N1, o virus humano, o (¿tan dificil es llamarle gripe, como la define el diccionario de la rae?).. creo que esta es una enfermedad que sólo afecta a los políticos..
Pero bueno, esa es la opinión de un paranoico como yo.. Por lo pronto habría que ver cómo le darán en la madre a la economía mexicana estas "medidas preventivas"..
mas vale solo... que malinfluenzado... jejeje... es un juego bastante torcido y malgno eh? este del gobiernante y gobernado... ya el pueblo deja de ser el fin y se convierte en el medio para el fin propio y la ascendencia de la carrera politica
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